4 claves para ser un músico exitoso
1. Ser artista
Hay quienes dicen "No soy un artista. Soy músico". Cuando subes a la escena, tienes que ser un artista porque estás tocando para el público. O no subas.
"Tú puedes tener una voz maravillosa y ser un virtuoso, pero si no transmites nada, si estás vacío, es mejor que no subas al escenario. (Dmitry Hvorostovsky, el baritón de oro)."
En tu vida cotidiana puedes no ser un artista, puedes ser una persona normal y corriente, pero si estás participando en un concierto o en un espectáculo, tienes que saber transformarte y ser un artista. Incluso los músicos que están en un segundo plano (guitarristas, baterías, etc.), que creen que el público no los mira y piensan que el que tiene que tomar el protagonismo es el cantante, tienen que tener en cuenta que el público ve perfectamente a cada uno de ellos y percibe la energía que le transmiten.
2. Dominio y magnetismo
Aunque suena un poco prepotente, en este caso ser dominante no significa ser arrogante ni mucho menos agresivo. Es la capacidad de conseguir que el público reaccione a las emociones y sentimientos que experimentas cantando o tocando. No sólo tienes que vivirlas tú, sino también saber transmitirlas a las personas que te están escuchando, saber contagiarlas.
Ser magnético es una luz oculta que no se ve, pero se siente. Precisamente esa luz llega a la gente. Eso no se puede explicar, ni ver ni tocar, pero es mucho más real y tangible que la escena, los micrófonos, los instrumentos... Porque es lo que atrae a los fans, a la gente..
"Cuando subes a la escena, tienes que ser un artista porque estás tocando para el público. O no subas."
3. Contacto con el público
Saber abrir tu corazón, tu mundo interior, tus sentimientos... Si estás en contacto emocional con tu público, ellos te responderán. Sólo unos pocos son conscientes de esto.
Cuando te piden animar al público, no significa que tienes que tocar o cantar más alto, gritar cuando no te apetece o cuando, peor aún, no es adecuado. Contactar con el público significa fusionarse con las emociones y sentimientos, sentir las ondas energéticas de los que te están escuchando, vivir la experiencia junto a ellos y permitirles que vivan la experiencia junto a ustedes. Y de ahí sale todo: improvisación, aplausos, palabras, agradecimientos, etc.
4. Amar al público
Al salir al escenario tienes que sentirlo: "¡Yo los amo!". "¡Para mí son lo más importante!". "¡Todo lo que hago es para ustedes y por ustedes! ¡Estoy aquí gracias a ustedes!".
¿Acaso, no es así?. Y si no es así, ¿por qué el público te va a amar a ti?
Aplica estos 4 secretos en tus espectáculos, ya sea que trabajes solo o con un grupo, y verás cómo se potencia tu creatividad, se recupera la inspiración, cómo está más receptivo el público contigo y cómo mejoran tus espectáculos.
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