Al parecer la prisión no logró cambiar al artista en el sentido de la ostentación y los alardes que hace de sus bienes materiales…
La sonrisa volvió al rostro de Omega. Se le vio contento, normal, un fuerte, en el programa de “Nuria Piera” (canal 9). El merenguero, que pasó casi tres meses preso en la cárcel acusado de violencia de género, retoma su vida artística “más conservador” sin dejarse ver en sitios públicos.
Eso sí, encima cargaba, en un estimado al ojo por ciento de Nuria Piera, con más de 12 millones de pesos en ropa y joyas.
El reloj Rolex fue valorado por él en 105 mil dólares; un collar que tenía en su pecho valorado en 120 mil, los aretes no sabía el valor, pero los guillos uno estimado en 70 mil y otro en 35.
Además, con unos pantalones Cavalli, que pueden costar mil dólares, y unos zapatos de marca Premium, que suman cerca de 52 mil pesos en vestimenta. Los diamantes son su especialidad.
“Me gustan”, admite. Y, riéndose, da sus razones ante la pregunta de si es por que brillan mucho. “Sí, entonces como a uno le falta brillo uno se anda poniendo vainas que brillen”.
Omega no prevé durar mucho tiempo con todas estas joyas porque ya tienen su destino. “No lo he dicho, pero voy a hacer algo que va a trascender mucho, porque yo pienso donar todo esto; en siendo blingblines y todo lo que ustedes ven yo lo voy a donar; alguna institución se va a quedar con eso en un momento. Lo voy a entregar en una bandeja porque pasó el momento”.
Claro, aún no es tiempo. “Mientras tanto uno lo utiliza porque uno hay muchas personas que se proyectan en tu vida, en lo que te pasa a ti ellos se ven; ellos se ven como un espejo de lo que le puede ocurrir”.
Quiso dejar claro que no se pone todas esas joyas “por una negatividad” y reiteró que “en su momento dado eso pasará”.
Eso sí, encima cargaba, en un estimado al ojo por ciento de Nuria Piera, con más de 12 millones de pesos en ropa y joyas.
El reloj Rolex fue valorado por él en 105 mil dólares; un collar que tenía en su pecho valorado en 120 mil, los aretes no sabía el valor, pero los guillos uno estimado en 70 mil y otro en 35.
Además, con unos pantalones Cavalli, que pueden costar mil dólares, y unos zapatos de marca Premium, que suman cerca de 52 mil pesos en vestimenta. Los diamantes son su especialidad.
“Me gustan”, admite. Y, riéndose, da sus razones ante la pregunta de si es por que brillan mucho. “Sí, entonces como a uno le falta brillo uno se anda poniendo vainas que brillen”.
Omega no prevé durar mucho tiempo con todas estas joyas porque ya tienen su destino. “No lo he dicho, pero voy a hacer algo que va a trascender mucho, porque yo pienso donar todo esto; en siendo blingblines y todo lo que ustedes ven yo lo voy a donar; alguna institución se va a quedar con eso en un momento. Lo voy a entregar en una bandeja porque pasó el momento”.
Claro, aún no es tiempo. “Mientras tanto uno lo utiliza porque uno hay muchas personas que se proyectan en tu vida, en lo que te pasa a ti ellos se ven; ellos se ven como un espejo de lo que le puede ocurrir”.
Quiso dejar claro que no se pone todas esas joyas “por una negatividad” y reiteró que “en su momento dado eso pasará”.
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