Existe un momento en la vida de todos los adultos en el que el sexo supera los límites “normales” y se imprime en nuestras memorias como la instancia en la que la cama literalmente tembló y nos preocupamos pensando que los vecinos llamarían a la policía. Este momento depende de las preferencias de cada quien, pero hay seis experiencias sexuales que vale la pena probar.
Noche de bodas
Puede que lleves mucho tiempo con tu pareja, y por ende ya estés más que acostumbrada a hacer el amor con él, pero tu noche de bodas es uno de esos momentos en los que tu mente llegará a universos que ni te imaginabas: él está guapísimo, tú te sientes la mujer más hermosa del mundo (además, todos llevan diciéndotelo la velada entera), el evento entero gira alrededor de ti y estás más feliz de lo que pensabas posible. La única recomendación: controlen la bebida, no querrán que su noche especial termine en un fiasco.
Después de una separación
Los humanos somos simples, deseamos aquello que no podemos tener y nos damos cuenta del verdadero valor de las cosas (y personas) una vez que no están a nuestro lado. El espacio y distancia que crea que alguno de los dos se ausente por un par de días los pondrá en dieta obligada de sexo y afecto, ¿el resultado? Una noche interminable de pasión una vez que vuelvan a verse.
Sexo de reconciliación
Aunque la comunicación verbal es muy importante en las parejas, muchas veces los problemas y descontentos no sólo se arreglan en las sábanas, sino que encuentran allí su lecho de muerte. Después de la adrenalina que puede causar una discusión encendida, se elevan los niveles de testosterona, un escenario fantástico para una noche de sexo pasional.
Sexo con un ex
Una vez que hayas enterrado cualquier sentimiento por tu expareja no hay por qué privarse de lo estimulante que puede ser el sexo con él. No sólo se conocen íntimamente, sino que el hecho de que no haya títulos les permitirá explorarse mutuamente sin tapujos ni reservas. Eso sí, olvídate de utilizar el sexo como estrategia de reconciliación.
Sexo de cumpleaños
En una línea similar a la de la boda, festejar los cumpleaños tuyos o de él es más que suficiente motivo para darse de regalo una velada inolvidable llena de pasión. Si es su día, encárgate de complacerlo en todos los sentidos y sorpréndelo con un nuevo juego de ropa interior. Si es el tuyo, relájate y disfruta.
Sexo de vacaciones
Atrás quedan el estrés del trabajo, los familiares chismosos, los cuartos conocidos, los espacios pequeños, los recibos… Son sólo tú y él, y la infinidad de posibilidades que les ofrece un nuevo ambiente. De alguna manera hacer el amor en un paraje extraño es completamente novedoso y estimulante.
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