A las mujeres nos encantaría saber lo que están pensando ellos TODO el tiempo, pero desafortunada (o afortunadamente) no existe aún la forma de leer los pensamientos de otros seres humanos. Y es que a muchas de nosotras la cercanía e intimidad que crea tener sexo con un hombre puede ponernos realmente nerviosas y aunque muchas veces nos mordemos la lengua para no hacerle preguntas que lo saquen corriendo (¿qué sientes por mí?, ¿qué somos?, etc.), su actitud después de hacer el amor puede decirnos mucho sobre el tipo de hombre que es y lo que podemos esperar de la relación. Pon atención a su actitud después de hacer el amor:
Quiere abrazarte
Después de hacer el amor contigo, lo único que quiere hacer es abrazarte, sostenerte y besarte… ¡quédatelo! Este tipo de actitud demuestra que es un hombre cariñoso. que se siente cómodo expresando sus sentimientos y seguramente quiere una relación estable contigo a largo plazo.
No quiere abrazarte
Si él cae en la categoría contraria, es decir, los hombres que no les gusta la cercanía después del sexo, no lo tires todavía. La gran mayoría de los hombres le huyen a la intimidad, sobre todo al comienzo de la relación, sólo debes preocuparte seriamente si antes era del tipo afectivo y ahora no lo es. Si este es el caso, háblale al respecto de manera tranquila.
Silencio
Si tu pareja es del tipo conversador que se convierte en un témpano de hielo después del sexo, puede que esté preocupado con su desempeño sexual, o esté teniendo una meditación postsexual. Dale un beso y susúrrale lo mucho que te gustó y dale su espacio.
Se duerme
Antes de dar por sentado que no le interesas o que el sexo se le hizo aburrido, es bueno que sepas que el sexo estimula la dopamina, un neurotransmisor que envía señales de “bienestar” y “tranquilidad” por lo que una siesta después del sexo es lo más normal. ¡Aprovecha tú también para reponer tus energías!
Puerta afuera
Si él es de los que se levanta inmediatamente después del sexo a ponerse la ropa y buscar la salida más cercana, ten cuidado. Si sucede una vez, y se toma el tiempo de explicarte por qué se va, está bien, pero si se trata de algo que se repite, lo más seguro es que tenga problemas con la intimidad y esté lejos de estar listo para una relación seria.
Quiere comer
Aunque el sexo quema calorías, no es el equivalente a una hora de cardiovascular en el gimnasio. Si tu chico insiste en alimentarte después del sexo, seguro se está preparando para la segunda ronda.
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