Cuando Ramón Rodríguez entregaba algunas pizzas ordenadas en el Papa John's de Sunset Park, en Brooklyn, sus clientes esperaban mucho más que pan, salsa y queso parmesano: Las autoridades aseguran que utilizando su trabajo "delivery man", el hispano de 45 años aprovechaba para hacer sus entregas de cocaína.
La fiscal especial Bridget G. Brennan y el comisionado de la Policía de Nueva York, Raymond, Kelly, informaron esta tarde del arresto de Rodríguez y un ayudante, a quien identificaron como Jonathan Martínez, de 28 años.
Ambos fueron atrapados como resultado de una investigación encubierta que comenzó en 2011. Ayer, Rodríguez fue puesto bajo arresto cuando se disponía a vender, por $27,500, un kilo de cocaína a un agente encubierto. Esa fue la más reciente de las 19 transacciones de venta de la droga que le imputa la Policía.
De acuerdo a lo expuesto por el agente encubierto, para realizar muchas de sus transacciones Rodríguez utilizaba su uniforme de Papa John's e incluso se encontraba con él frente al negocio, localizado en el 5804, de la Quinta Avenida en Sunset Park. Así ocurrió ayer, con la diferencia de que cuando Rodríguez salió del restaurante y colocó en el baúl del auto del "cliente" una caja de pizza, una de masitas de pollo y una bolsa, fue arrestado. Adentro de la bolsa estaba el kilo de cocaína.
Anoche la Policía realizó un registro en su hogar, en la Novena Avenida, y encontró $4,500 en efectivo, una pesa y material para empacar la droga. Además, dentro del auto del hombre descubrieron una pequeña cantidad de cocaína.
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